Sólo 24´ le alcanzaron a Platense para definir el pleito frente a un muy limitado Cambaceres. El Calamar encaró el partido con tranquilidad, sin desesperarse, y aprovechando la gran ventaja técnica de sus jugadores por sobre el rival. Y así fue empujando, siendo más profundo y creando algunas situaciones. A los 19´una entrada de Lovera por izquierda, el delantero que cae producto de la fricción con el defensor de Cambaceres y Castro sentencia penal. Jugada para la duda, y para ver otra vez, pero casi como que el penal fue el premio a tanto ir, y ser detenido siempre con faltas que merecieron más de una amarilla. Faltas que recién el árbitro se acordó de penar con tarjeta a los 20´ del segundo tiempo.

Penal para el botín de Vega. El goleador del torneo con 11 tantos en 12 fechas no se puso nervioso y la colocó con suavidad junto al palo derecho del arquero que se arrojó hacia el otro sector.

Con esa motivación Platense fue por más y los de Ensenada volvieron a demostrar sus falencias. A los 24´ una diagonal de Lovera, una salida a destiempo del arquero César Gonzalez, el delantero de espalda al arco tocó de media chilena por encima del mismo y la pelota picó ante la mirada atónita de defensores y delanteros, para acomodarse junto al parante izquierdo donde un defensor parado en ese mismo poste no llegó a evitar el 2-0.

Despúes sí, Platense se resignó, Cambaceres se deprimió y pasó muy pero muy poco.

Sin duda el equipo calamar sintió el desgaste de jugar 2 partidos en 72 hs, por eso el Mago González no estuvo en su noche más lúcida, Vega corrió sin rumbo y jugó siempre de espaldas al arco, Lovera de aceptable primer tiempo se volvió a perder en el segundo tiempo. Rojas y Alvarez también sintieron la fatiga... casi todos menos Mercier, un robocop en el mediocampo. Siempre al mismo ritmo fue nuevamente la figura del marrón.

A pesar de estas ventajas Cambaceres no logró inquietar a Ezquerra (salvo cuando el arquero se generó peligro por su propia cuenta con salidas en falso). El rojo, a pesar de tener la pelota el 70% del tiempo, y el 60% del campo de juego fue impotente hasta el final.

En Platense ingresó Giarrizo y volvió a cerrar la cancha, aunque las posibilidades ofensivas también. Uranga reemplazó a Lovera, pero no le llegó una pelota clara. Lo más positivo fue el ingreso de Ledesma (debut en Platense) por Banegas. El ex Colegiales se mostró con seguridad tanto de arriba como de abajo.

Ahora, los 2 a descansar por algunas horas para pronto continuar con un trabajo duro. Platense esperará que sus inmediatos perseguidores no sumen mientras que Cambaceres aguardará que sus rivales en la lucha por el descenso se caigan.

Lo cierto es que ambos conjuntos tienen mucho por mejorar aún, uno si quiere ASCENDER y el otro si tiene aspiraciones de MANTENER la categoría.