Los primeros 15 minutos, fueron parejos y muy cautelosos, ambos equipos no
arriesgaban demasiado para llegar a área rival, tal vez insinuando un poquito
más el equipo local llegó con un remate de Flores Corone a los 9' y a los 12'
un cabezazo de Hugo Ibáñez, pero ambos sin inquietar demasiado el arco defendido
por Pauliti.
7 minutos después (19'), la jugada por parte de Barracas Bolívar, un remate
de Figueroa que tampoco inquietó al arquero local, Denis Roberts.
A partir de ese intante Argentino de Rosario poco a poco se iba acercando mas
al área de Barracas Bolívar y a manera de aviso a los 23` Sandro Sánchez y a
los 26 minutos con sendos remates desviados, iban marcando de a poco las intenciones
de los locales.
Hasta que a los 29', aparece por parte de los Salaítos, una jugada de otro partido
con respecto a lo que se había jugado hasta ese momento. Hugo Ibañes en un desborde
por la izquierda, toca la pelota a Flores Coronel, quién tras una hábil y muy
vistosa maniobra deja solo en el punto de penal a Facundo Castillon, quién con
un remate cruzado convierte, marcando así la pequeña diferencia que existió
en los primeros 45 minutos, la jugada del gol.
El comienzo del complemento mostró un Barracas más ordenado y con la clara intención
de buscar el empate, a los 6' Norberto Figueroa tras una jugada por izquierda
queda solo frente al arquero Roberts y levanta la pelota sobre el mismo, y el
palo le dice no a Barracas Bolivar.
Esa situación, hizo despertar a Argentinos de Rosario quién presionó más y logró
llevar peligro en 3 oportunidades más sin lograr concretar por falta de oportunidades.
Los Arrabaleros, si bien sin orden, pero con más voluntad y corazón, que claridad,
obligó a Argentinos a jugar de contragolpe, así fue que con lucha, a los 89
Enzo Klemenco desvía una un cabezazo sobre el travesaño solo por centímetros,
a los 91 Gonzalo Benitez ante un rechazo fallido de Roberts le pega de aire
y sale rozando por milímetros el travesaño.
Los arrabaleros se jugaban al todo o nada, así fue como con un certero contragolpe
de los locales, realizado por Balmaceda, quién toca la pelota a Hugo Ibáñez
que queda solo para definir ante Pauliti, de esta manera define el encuentro
el Salaíto. Un minuto después es expulsado Altobelli en una jugada con evidente
bronca que se desquitó discutiendo con la tribuna local, con lo cal se ganó
la tarjeta roja.
Demasiado premio, para el Salaíto y demasiada injusta la suerte para Barracas
Bolívar, un empate hubiese sido justo por lo hecho en el campo de juego por
cada uno de los equipos.
Enterate
de todo lo que ocurrió desde el corazón mismo de la cancha con nuestro corresponsal
José
Marengo.
