Apenas comenzaba el choque entre ambos conjuntos de la zona norte, llegaba
una noticia desde el sur que le servia a los dos equipos: Temperley había perdido
de local frente a Los Andes y daba la chance de que alguno se quede con el liderazgo
de la B Metropolitana. Y ese fue el Dragón.
A los diez minutos del primer tiempo, Torrez Mozzoni dejaba la cancha por un
pisotón en el pecho a Martín Uranga.
Parecía que la punta del campeonato se volvía a vestir de Marrón, pero nada
de eso sucedió.
El conjunto del Bajo Núñez se agrandó y con un hombre menos tuvo las situaciones
más claras para llevarse un merecido triunfo que lo pone como principal candidato,
por juego y actitud.
El “Calamar” no sabe todavía como salir del fondo del mar aunque este a solo
tres puntos del primero. La emoción definitiva de la tarde llegó a los treinta
minutos de la segunda parte cuando Guerra, de bolea, la clavó en el palo más
lejano de Arnaudo, luego de una mala salida de la defensa visitante.
No hay nada mejor para explicar este mal momento que pasa Platense desde las
palabras del delantero Uranga, al termino del cotejo: “Me da vergüenza hablar,
hoy fuimos locales y la tribuna nuestra explotaba. Le volvimos a fallar a la
gente y ya no tenemos más palabras para demostrar la impotencia que sentimos”.
Fotos: Andres (Ancho) Piccione
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nuestro corresponsal Marcia Alé.
